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Moisture Analyzer

Termobalanzas

Tecnología de calentamiento halógeno y pantalla táctil intuitiva para una determinación rápida de la humedad

Una termobalanza es un instrumento analítico que utiliza un calentador halógeno para secar una muestra con el fin de determinar su contenido de humedad. Nuestras termobalanzas digitales determinan la humedad con un pesaje de alta precisión y capacidad de control de la temperatura. Su diseño robusto y su intuitiva guía de usuario las convierten en una solución ideal para simplificar y potenciar el control de calidad y los procesos de producción en diferentes industrias.

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Ventajas de las termobalanzas de METTLER TOLEDO

Rápida amortización del analizador de humedad

Rápido retorno de la inversión

Los resultados de humedad rápidos y fiables le ayudan a aumentar la productividad, optimizar los procesos y ahorrar dinero.

Termobalanza de Mettler Toledo

Resultados precisos para todos los tipos de muestras

Obtenga resultados de humedad altamente fiables y repetibles gracias al rápido calentamiento halógeno y a un rendimiento de pesaje superior.

Analizadores de humedad de alto rendimiento

Analizadores de humedad de alto rendimiento
Los analizadores de humedad HX204 y HS153 ofrecen resultados altamente precisos y repetibles para cualquier tipo de muestra, y pueden cumplir todos los requisitos de conformidad.

Termobalanzas de alto rendimiento

Las termobalanzas HX204 y HS153 ofrecen resultados altamente precisos y repetibles para cualquier tipo de muestra y pueden cumplir todos los requisitos de conformidad.

Analizador de humedad robusto y polivalente

Analizador de humedad robusto y polivalente
El funcionamiento mediante pantalla táctil y la guía del usuario facilitan la determinación del contenido de humedad en una amplia gama de muestras. Su diseño compacto y su robusta construcción hacen que el HC103 sea ideal tanto para el laboratorio como para la producción.

Termobalanza robusta y polivalente

El funcionamiento mediante pantalla táctil y la guía del usuario facilitan la determinación del contenido de humedad en una amplia gama de muestras. Su diseño compacto y su robusta construcción hacen que el HC103 sea ideal para su uso tanto en el laboratorio como en la producción.

Termobalanza de fácil manejo

Funcionamiento intuitivo y sencillo

Los usuarios pueden iniciar sus métodos de secado directamente desde un acceso directo en la pantalla de inicio. La guía de usuario en pantalla simplifica el funcionamiento y minimiza los errores, incluso para los operarios sin formación.

Adecuado para laboratorio y producción

Adecuado para laboratorio y producción

La carcasa resistente y los componentes robustos garantizan una larga vida útil del instrumento, incluso en condiciones adversas.

+34 900 922 550
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Explore nuestros servicios, adaptados a las necesidades de su equipo

Le ofrecemos la asistencia y el mantenimiento que necesita su equipo de medición durante toda su vida útil, desde la instalación hasta el mantenimiento preventivo, pasando por la calibración y la reparación del equipo.

¿Para qué sirve una termobalanza?

Una termobalanza es un dispositivo de medición que se utiliza para determinar el contenido de humedad de pequeñas muestras de materiales mediante el método de pérdida por secado. En primer lugar, el aparato pesa la muestra y, a continuación, utiliza una lámpara halógena para calentarla continuamente. A continuación, se registra la pérdida de peso y el proceso de secado finaliza cuando se alcanza un criterio definido. El contenido de humedad se calcula automáticamente a partir de la diferencia de peso.

Muchas industrias, como la farmacéutica y la de alimentación y bebidas, confían en las termobalanzas durante el control de calidad y los procesos de producción para determinar el contenido de humedad de diversos productos. Esto se debe a que la humedad afecta a la procesabilidad, la vida útil, la utilidad y la calidad de muchos productos, como sustancias farmacéuticas, plásticos y alimentos. Por lo tanto, controlar el contenido de humedad es crucial para garantizar la mejor calidad posible del producto. Además, el contenido de humedad puede influir en el precio de los productos, e incluso existen normas legales para algunos productos que regulan el contenido máximo de humedad permitido.

¿Cuáles son los principales componentes de una termobalanza?

Los principales componentes de una termobalanza consisten en un portamuestras, una unidad de balanza, un horno (unidad de calentamiento), una unidad para la medición y el control de la temperatura, y un registrador que registra automáticamente el cambio de masa y temperatura de una muestra.

¿Cómo funciona una termobalanza?

Una termobalanza utiliza el principio termogravimétrico, que también suele denominarse método de pérdida por desecación (LOD). Para determinar el contenido de humedad de una muestra, el aparato registra su peso inicial. A continuación, la muestra se calienta y se seca mediante una lámpara halógena u otro calentador de infrarrojos, mientras que la balanza integrada mide continuamente su peso. En cuanto la muestra deja de perder peso, el aparato se apaga y calcula el contenido de humedad. La pérdida total de peso se utiliza para calcular el contenido de humedad.

¿Cuáles son las principales aplicaciones de una termobalanza?

Una termobalanza es una herramienta esencial en muchas industrias que requieren una determinación rápida de la humedad de productos como los farmacéuticos, alimentarios, químicos, etc.

Las principales aplicaciones de una termobalanza son la determinación de la humedad en laboratorios y procesos de producción durante los controles de calidad. Los sectores farmacéutico, alimentario, químico, azucarero, lácteo, de materiales de construcción y de cereales, entre otros, las utilizan ampliamente.

Una termobalanza, por ejemplo, puede utilizarse en la industria farmacéutica para analizar el contenido de humedad de los productos farmacéuticos durante el control de calidad y la fabricación. También puede utilizarse en la producción de muestras médicas. Mientras que en la industria alimentaria puede analizar la humedad de carnes, frutas y verduras, harina, proteínas en polvo y otros productos para garantizar su procesabilidad, caducidad y calidad general.