En una transacción comercial, en la que el precio del producto que se vende se basa en su peso, la balanza o báscula empleada debe ser una versión con “autorización legal”, lo que, a veces, también se conoce como versión “aprobada”. En esas transacciones de pesaje con “autorización legal”, el peso debe determinarse con exactitud para asegurar la equidad tanto para el comprador como para el vendedor.
Cuando el producto que se pesa es muy valioso, como ocurre en el comercio de joyas y piedras preciosas, un pequeño error de medición podría significar una pérdida económica considerable para una de las partes en la transacción. El comprador quiere estar seguro de que está recibiendo la cantidad total de oro o gemas por la que ha pagado; por su parte, el vendedor quiere estar seguro de que no está sufriendo ninguna pérdida en la venta. Además, cualquier mayorista o minorista de joyas quiere mantener su reputación de ser un comerciante de confianza. Esto solo puede suceder si el proceso de pesaje con “autorización legal” realizado proporciona resultados exactos.
Los requisitos legales para el equipo de pesaje varían de un país a otro y es importante que los mayoristas y minoristas se aseguren de que cumplen los requisitos locales de la zona en la que comercian.