Control del pH y la temperatura automatizado | Caso práctico
Caso práctico

Control de pH y temperatura automatizado

Caso práctico

Evite la formación de impurezas eliminando las variaciones de temperatura y pH durante la dosificación

Control de pH y temperatura automatizado
Control de pH y temperatura automatizado

En este caso práctico, se describe cómo se evita la formación de impurezas con el control de pH y temperatura automatizado durante la dosificación de reactivos en una reacción química.  Un control estricto de los parámetros del proceso cruciales, incluida la temperatura, el pH, las velocidades de dosificación y la mezcla en un proceso de síntesis química, puede minimizar los productos derivados generados por las variaciones de temperatura y pH.  La temperatura y el pH de la reacción pueden influir directamente en la velocidad de reacción, el tipo y la concentración de los productos secundarios y la descomposición.  Las variaciones de la temperatura y el pH suelen generar más productos secundarios y la descomposición de productos intermedios inestables.  La importancia del control del pH automatizado ha hecho que en los últimos años se haya incrementado el número de publicaciones dedicadas a los procesos dependientes del pH, especialmente, en el caso de las reacciones enantio-, quimio- y regioselectivas.

En este caso práctico, se investiga la importancia de estos parámetros para la automatización de una reacción de dos fases sensible a la temperatura y el pH:  la síntesis de trietilo-2,2, -diclorofosfonoacetato.  Los derivados del fosfonoacetato revisten interés por diversas razones, entre otras, por su conexión con la actividad antiviral y con potentes insecticidas o herbicidas.

Este caso práctico describe la dosificación gravimétrica automatizada y el control de bombas de jeringa de otros fabricantes, la medición y el control del pH.  La realización de dosificaciones gravimétricas y control de pH automatizado en este estudio se logra de forma reproducible en esta reacción de dos fases sensible al pH. Para lograr un rendimiento y una selectividad adecuados, y evitar la formación de productos secundarios, la temperatura y el pH deben mantenerse constantes durante toda la reacción.